martes, 22 de abril de 2008

Americanito is on the way


Ja,ja,ja, llevo meses deseando hacer esto, literalmente. Nuestro hijo tiene un retrato antes de venir al mundo. Evidentemente estamos alucinando con la experiencia, de momento está siendo maravillosa y estamos emocionados, qué más puedo decir. Esta es la segunda ecografía y corresponde a la semana 11 aproximadamente, yo no sé qué opináis vosotros pero a mi me parece un alien total. En la primera ecografía parecía una especie de guisante, y como Sara estaba por aquella época empeñada en que quería comer garbanzos (su primer antojo chispas), pues de momento y hasta que sepamos el sexo de la criatura le hemos bautizado cariñosamente como "Garbanz". La cosa ha calado porque todos los allegados ya le llaman así, no sé que vamos a hacer de ahora en adelante, el tema de los nombres y la identidad está complicado (nombre español aquí, muchos impronunciables para el americano medio, nombre americano.......como que no).

No te preocupes hijo, como hizo Darth Vader con el joven Skywalker te diré aquello de "Yo soy tu padre", así con voz cavernosa para que no me pierdas el respeto cuando te vayas con la pandilla de raperos del barrio.

Desde luego esto es lo más acojonante que nos ha pasado en la vida, de momento. Algunos os váis a enterar por este medio, espero que lo entendáis, y así dejáis unos comentarios en el blog, seguro que a "Garbanz" le encantará leerlos cuando cumpla 18 porque va a ser un pedazo de friki como su padre, seguro.

Everglades National Park

No, no me he vuelto loco, realmente estuvimos allí. Llevo un retraso fenomenal con las cosas que quiero publicar aquí, debido a una montaña de trabajo que he tenido las últimas semanas. Hace unas semanas fuimos a Miami a pasar el fin de semana. Evidentemente la oportunidad de visitar los Everglades no se podía dejar pasar.

Es un lugar único en el mundo, desde luego yo no he visto nada igual. Supongo que hay ecosistemas parecidos, ¿pero a una hora de una metrópoli de varios millones de habitantes?. El Parque Nacional de los Everglades es el espacio natural con ecosistema subtropical más grande de los Estados Unidos. Fue una visita relámpago, no nos dio tiempo a coger el hovercraft que te lleva por el "mar de hierba". Lo que tengo claro es que es un sitio al que quiero volver con calma. Aún así, le dí bastante caña a la cámara, y sorprendentemente la fauna es muy tranquila, dejan acercarse bastante.


Estuvimos en el Parque básicamente por la tarde, llegué con la típica ansiedad de pensar si iba a poder ver algo, qué imagen me llevaría de esta maravilla, uno de los mejores sitios para la observación de fauna silvestre de todo el continente americano. La verdad, no me defraudó. Fue un "paseo¨ (en coche, hicimos como 60 millas para llevarnos una impresión general), parando en los lugares donde veíamos algunos bichillos, como por ejemplo esta pequeña rapaz (no he tenido tiempo de identificar la especie) que se estaba poniendo morado a saltamontes y que me dejó acercarme más de lo que nunca me ha permitido un ave de este tipo. Esta foto no está hecha ni siquiera a tope de zoom, me gustó más este encuadre. Como soy un ansioso le debí tirar como 40 fotos, esta es la que más me ha gustado (pero no le dí a la ráfaga casi nada, que me estoy quitando de ese vicio).



En el embarcadero que hay en el Flamingo Visitor Center había un par de ejemplares de un ave que me fascina, el pelícano. Esta foto corresponde a un ejemplar inmaduro, es más feo que el adulto en cuanto al plumaje, pero la foto me gusta más. Estaría mejor sin las gaviotas de primer plano, pero prefiero no alterarla. Este bicharraco se puso a pescar en el mismo embarcadero, y es flipante ver cómo capturan peces con la gran bolsa que tienen colgando de la parte inferior del pico.









Y por último, para fliparlo ya del todo, y cuando estábamos a punto de irnos, en la última parada en un lago que baña un manglar enorme, nos encontramos con un "alligator" americano, o sea en cristiano un caimán.















Debía medir unos tres metros y medio aproximadamente, y le hice esta foto desde unos tres metros de distancia. Joer, y no me llevo ni un premio por valiente ni nada, la verdad es que no me planteé si me iba a atacar ni nada, normalmente no lo hacen y estaba más preocupado de sacar la foto que otra cosa (hay que ser idiota, supongo, pero ahí queda mi primera instantánea de un alligator en estado salvaje). Bueno, lo he contado en plan épico y tal pero tampoco os penséis que soy Indiana Jones, que había unos viejecitos dándose un pirulo en piragua y vieron algunos mucho más grandes desde la piragua.

Si hay suerte, la próxima vez que visitemos los Everglades lo haremos con más calma, es el "Doñana" que necesitábamos aquí, habíamos cogido la costumbre de hacernos una escapadita invernal para ver aves y este parece el sitio, desde luego.