New opportunities

Desde que volví de Navidades, decidí que iba a ampliar mis opciones laborales en la zona de Washington. El peor momento para hacerlo en toda mi vida laboral sin duda, pero creo que donde hay crisis, también hay oportunidad. Y los cobardes nunca obtienen premio. Así que envié algún curriculum (creo que envié cinco en total). Había un anuncio en particular que me atrajo, porque describía mi perfil al dedillo (luego he visto otros dos o tres trabajos exactamente iguales en el último mes, lo cual me anima bastante), y me apetecía mucho trabajar ahí. Me llamaron relativamente pronto pero el proceso de selección ha durado más de lo que esperaba, y por fin hoy me han confirmado que el cliente acepta mi candidatura y empiezo el lunes.

El Gobierno Federal, una de cuyas agencias es donde voy a trabajar a partir de la semana que viene, hace un chequeo de cada empleado, sea directo o a través de una empresa. Yo trabajaré a través de una empresa. Para poder trabajar ahí miran bastantes cosillas y las medidas de seguridad son muy estrictas, si alguna vez has tenido problemas con la justicia quedas automáticamente eliminado. Yo estaba convencido de que no iba a tener problemas (siempre he sido un ciudadano ejemplar, je, je), pero siempre te queda la duda, quizás te vuelves un poco paranoico por ser extranjero. Y como quería hacer las cosas bien, avisé a la empresa para la que estaba trabajando hasta ahora (como freelance) con suficiente tiempo para no hacerles un agujero excesivamente grande, porque soy el único que les hace los trabajos de mi especialidad. Tenía proyectos y trabajo para los próximos seis meses garantizados (más los que irían entrando a lo largo del año).

En medio de la tormenta y con cientos de miles de parados nuevos cada mes, yo he estado sin un trabajo seguro durante cuatro días, que he estado de "vacaciones" y sin empleo. Ha sido muy poco tiempo pero se podía haber convertido en tirar a la basura un trabajo cómodo y seguro si la apuesta me hubiese salido mal.

Me la he jugado un poco, vamos. Pero tenía que hacerlo. Me apetece mucho esta nueva etapa, entro a trabajar en una estructura más rígida y formal y ya no podré hacer lo que quiera con mis horarios o trabajar desde casa, pero me incorporo a un equipo de 80 personas trabajando en un entorno grande y muchísimo más exigente, como estaba acostumbrado antes de venirme a trabajar aquí (no es que lo que haya hecho haya sido "pequeño", porque las escalas de los proyectos informáticos aquí tienen otra dimensión al ser un país tan grande y disponer de tantos medios, pero ahora va a ser a lo bestia).

Ah, y otra de las ventajas es que cobro las horas extra que me toque hacer (en dinero o tiempo libre extra, a elegir), el horario de curro será más o menos de 9 a 5:30 aunque algo flexible, tengo un mes de vacaciones pagadas al año (un lujo asiático en este país) y cobro un 20% más de sueldo neto de lo que estaba ganando ahora en un mes típico. En un año he conseguido subir lo que cobro aquí un 30%, y estoy convencido de que todavía puedo estirar más la cosa económica, aunque no es mi prioridad pues aquí vivimos muy bien, la verdad. Todavía no me acostumbro a lo que se cobra por aquí (bueno venga, sí, sí me acostumbro).

Me apetece mucho porque creo que aprenderé muchísimo, y además vuelvo a trabajar con la tecnología que más me gusta y que más me motiva. De hecho estos días de "vacaciones" me he comprado un par de libros y he estado estudiando, masoca que es uno. Pero me alegro de que me guste tanto lo que hago, porque voy a trabajar con muchas ganas y por una parte estoy deseando que llegue el lunes.

Evidentemente existe una componente de suerte en todo esto. Por un lado siempre he pensado que la suerte se busca y sonríe a quien no se cansa de perseguirla, y a unos les cuesta más que a otros llegar a sus metas. Yo he trabajado duro este año, por lo que se ve me he adaptado perfectamente y tengo valor en este mercado tan competitivo (yo lo siento así). Esto me llena de satisfacción, pero también soy consciente de que tengo suerte, mucha suerte. Podría citar muchos motivos pero creo que el más importante es que mis padres tuvieron la visión hace muchos años de hacer un esfuerzo y enviarme (yo acepté, claro) a estudiar a USA cuando era un adolescente, y aprendí el idioma muy bien. Esto me abre muchísimas puertas hoy en día, no tengo ningún problema no sólo con el idioma sino con muchas de las costumbres gracias a haber vivido previamente aquí. Noto una grandísima diferencia con algunos expatriados, yo soy más "americano" que la media, supongo.

El mismo día que me dan luz verde y una noticia tan buena, se publican los datos de paro en Estados Unidos para el mes pasado. En el mes de Febrero 651.000 personas han perdido su trabajo, aumentando el paro al 8,1%, lo cual es la peor cifra en este país desde hace 25 años. Hace sólo un año era la mitad, prácticamente pleno empleo.

No quiero mezclar temas y hablar de la crisis ahora, lo haré más adelante. Este post es para comunicar oficialmente que cambio de trabajo y que esto es lo que me ha tenido ocupado y preocupado durante bastante tiempo, y por eso no he escrito mucho. Me siento rejuvenecido, con ganas de volver a empezar y de hacer mil cosas otra vez. Este cambio, desde hacer el curriculum, la carta de presentación, involucrar a mis referencias en España (mil gracias, a los tres), las entrevistas, manejar los tiempos y la situación con mi empresa actual, y todo ello en medio de la debacle que nos rodea (mucho menor en Washington, desde luego), pues me ha consumido un poquito y no me ha dejado con muchas ganas de escribir.

A veces dudo si escribir y compartir estos pensamientos, pero al fin y al cabo esta es la finalidad de este blog.

Como dijo Terminator: Volveré