martes, 1 de septiembre de 2009

Snow Leopard: Mac OS X 10.6


Acabo de actualizar mi estación de trabajo a la última versión del sistema operativo de Apple. La instalación la puede hacer un chimpancé sin mayores problemas, hay que apretar un botón que pone "Install", esperar una media hora, y te actualiza el sistema operativo, respetando toda tu configuración, datos y aplicaciones instaladas. Realmente es así de sencillo, bueno, vale, me he comido un paso, hay que meter el DVD en el lector.

Esto sólo lo he visto con alguna distribución de Linux (no todas, y el soporte de hardware haciendo esto puede complicarse en ocasiones). Pensando en Windows me entra la risa, simplemente nunca les ha funcionado correctamente y ya me gustaría ver cómo alguien se intenta actualizar un Vista a Windows 7 apretando un botón.

El cambio estético es mínimo, hay algunos toquecitos sutiles pero en dos días ni me doy cuenta de que es distinto. Esto es una ventaja desde el punto de vista de la usabilidad, no necesito leerme nada ni adaptarme para ser productivo con este nuevo sistema. Tendrá truquitos nuevos, que será una gozada ir descubriendo, pero de momento lo que ya conozco sirve y mucho.

Las tripas han cambiado bastante, noto mi ordenador mucho más rápido todavía (no tenía quejas de velocidad, con 8 núcleos y 16 Gb de RAM voy bastante bien servido de hardware por el momento). Pero es que ahora abres tres o cuatro aplicaciones y no te da tiempo a hacer todos los click, se abren las ventanas a toda pastilla. Esto es debido a que todo corre a 64 bits, he cambiado el modo de ejecución de alguna aplicación a esta arquitectura y se nota una barbaridad lo optimizado que está.

Ah, y por 50 dólares tengo licencia legal hasta 5 máquinas. En el Apple Store estaban repartiendo, literalmente, decenas de copias el sábado pasado (segundo día a la venta).

Algún fabricante de software que tiene como mérito a partes iguales el haber democratizado la informática al mismo tiempo que ofrece productos de software de calidad mediocre debería tomar nota de cómo se hace un sistema operativo de verdad.



1 comentario:

Tía Jelene dijo...

marín... que se te cae la baba!!!